Solo conceptos...
- Facundo Alvanezzi
- 25 feb 2016
- 6 Min. de lectura
Para concretar un futbol ofensivo-generoso-creativo-de posesion-abarcativo y honesto, los
interpretes de este juego deben sentirse, ofensivos-generosos-creativos-apasionados-
comprometidos y honestos con el estilo y la forma de argumentar, no solo una forma de
jugar, sino de vivir...
Mantener el razgo de “utopia personal” para alcanzar la excelencia como virtud que
asoma en el horizonte, me ayudara a fundamentar el metodo para entrenar (siendo
intervencionista) para validar el crecimiento de los futbolistas guiandolos en sus
desarrollos...
Intentare dignificar mi esencia personal con etica (traslativa) y nobleza por educacion
recibida, para iluminar mi peregrinar en el camino de la formacion entre la vida y el futbol.
La ecuacion final,muestra el escenario que recorro para adaptarme a las sociedades
diferentes que transite y me cultiven en expansion para llegar algun dia al sitio que Dios,
la vida y el futbol me tendran reservado...
Nadie convive con la “Virtud” sin haber pasado previamente por el error, circunstancia
tangible de la naturaleza humana para alcanzar la grandeza...
La emocion, que brinda sensibilidades diversas al comun de la gente habituada solo a
sentir gratitud cuando se gana, es la indeferencia que se persive en aquellos que trabajan
denodadamente para dar emocion al mas media sin lograr el resultado abstracto
momentaneo...(solo por haber perdido).
Las ideas del buen entrenador despiertan curiosidad en modo proporcionado a un
determinado publico...Mientras las genialidades del eximio estratega, deslumbra a propios
y ajenos con trabajos que trascienden las fronteras de lo imaginable.
Un entrenador habituado a pensar, es como un jugador habituado a crear...La simbiosis
que inspira el espiritu de ambos, es cuando por actos cultivados durante los
entrenamientos, el dia del partido quien piensa, crea y ejecuta, funcionan como equipo
obedeciendo a una idea que pertenece a un individuo que transmite conceptos al
conjunto.
No existe dolor mas profundo que la derrota y sus consecuencias frustantes por las
razones que fuere...como tambien el sabor de la victoria nos reconforta el espiritu en su
justa medida...Uno trabaja para mejorar, evolucionar, competir y ganar, pero debemos
entender que tambien podemos empeorar, involucionar, participar y perder...Siendo la
resultante la reafirmacion o no, de las ideas, el estilo y la forma de jugar quien nos servira
de guia por siempre.
Superarnos individualmente implica atemperar los impulsos venidos del desconocimiento,
para abrigar con esperanza, humildad y honestidad, todo el saber de quienes nos
antecedieron dejando una valiosa y riquisima experiencia como legado.
Cuando hay vocacion ofensiva y jerarquia para imponerse a los vaivenes emocionales de
un partido, toda connotacion alusiva por la frustacion momentanea de un resultado
adverso, no debe alterar ni desnaturalizar la altura colectiva con que se desea jugar,
ganar y gustar. Apelando a la expectativa que nos generamos individualmente para
hacerla creible y real en los componentes del equipo y la sociedad que habitemos.
Siento una profunda sensacion de gratitud que no puedo dimensionar en palabras y que
excede mi posibilidad intelectual para expresarlo...Solo distingo en el trayecto como
premio al esfuerzo, el afecto de mucha gente como recompensa por mi modo de actuar y
obrar cotidianamente.
Como entrenador debemos promover el bien comun por sobre las valoraciones
personales que logran que un organico complejo como es un grupo de futbolistas, se
revele individualmente excediendo las pautas profesionales que rigen como limites de
convivencia. Esto conlleva indefectiblemente a liderar humanamente un grupo tomando
desiciones que el conductor utiliza para salvaguardar la integridad deportiva y la salud
intelectual para todo aquello que es nosivo, permanezca dentro del nucleo que orienta.
Todos aspiran a jugar y a la titularidad, pero nadie puede garantizar dignamente lo
descripto, aqui cobra vida la dignidad para asumir noblemente el trabajo y la tarea que
apunta a la excelencia para que un grupo atraviese las barreras de lo imaginable y se
respete reciprocamente. Hablo de conducir, guiar y liderar desde la seduccion y la
autoridad que me implica el cargo, pero de ninguna manera ser vulnerable por ajenos o
terceros para no respetar al futbolista que me guiara en mis ideas a compartir momentos
de gloria...
Toda posibilidad de despegue que imprima velocidad y aceleracion como razgo distintivo,
disminuira considerablemente los momentos de pausa para oxigenar la jugada, mientras
la consecucion cansina de pases y movimientos no ritmicos, adolecera de aceleracion
vertical como ilustracion de los ultimos pases en progresion lineal al arco contrario...Aqui
normalmente ya no hablamos de aceleracion o pausa sistematica, actuamos de acuerdo a
la vitalidad fisica y mental de los jugadores para desarrollar la idea de un futbol punzante
oh de un futbol anodino por lateralidad sin sentido.
El entrenamiento con el “Balon” , los ejercicios, las pautas y la seleccion de opciones,
sirven como elemento indispensable en el futbolista para entender a que velocidad
individual y traslativa en su conjunto, debe explotar y explorar sus condiciones
genuinas...pues la prestacion personal esta marcada por el grado de entendimiento entre
el jugador y la pelota. Alli radica a mi modo de ver, cuan veloz se es para ejecutar y
desplazarse en el campo.
Para anticipar una accion que nos viene solicitada, el buen futbolista tiene incorporado el
gesto previo en su mente y su cuerpo, logrando con sus modos estar en condiciones de
ventaja para proseguir con la elaboracion en sucesion y participativa...todo lo contrario
adviene cuando la posicion estatica por comodidad corporal /gestual/ mental, es el dato
ilustrativo que resalta la ejecucion erronea y confusa de lo solicitado. Ciertamente aqui las
formas de la comodidad invitan a equivocarnos mucho “antes” de trasladarlo al dia del
partido, donde no habra tiempo, espacio, pausa y explicacion del entrenador que nos
marco todo lo precedente en el presente...
La anticipacion de lo previsible es apto a muchos, la anticipacion de lo imprevisible es solo
para “elegidos”, por eso el instinto nos impone la tendencia de lo indescifrable como
naturaleza humana para superarnos personalmente todos los dias en cada
entrenamiento.
Por cada linea de pase realizada previamente por un jugador que oriento con el
movimiento corporal donde quiere el balon, el futbolista subsiguiente tendra ventaja de
recibir el mismo para seguir progresando y jugando. Sucede lo inverso cuando quien
ejecuta y quien debe recibir se encuentran en una misma linea con oposicion del rival
entre ambos para hacer dificultosa la accion y la maniobra.
Existen determinados movimientos orientados por el entrenador que ayudan al jugador a
encontrar respuestas indicativas en el campo. Mientras que el “Futbolista Instintivo” por
naturaleza, no necesita referencias verbales de ninguna indole para superar al adversario
que actua razonando...
En verdad no existe el absolutismo para cada accion, se producen secuencias estimativas
de lo que se deberia realizar en sectores del campo con los jugadores mas proximos para
desarrollar el juego.
Cuando la dinamica de juego es valorada intencionalmente por la velocidad mental de los
futbolistas, la diversidad (que enriquece al mismo), hace lucido, vivaz, brillante y
estimulante las acciones (individuales-colectivas) de un equipo de futbol.
Antes de comenzar un partido el “resultado” y las ideas son mayoritariamente
positivas...Luego con el transcurrir del mismo cobra vida lo minoritario como resultado
final (quien gana tiene razon dicen...), no analizando en profundidad como se llego hasta
alli aun sin merecerlo.
Todos tenemos derecho a la ilusion y a proponer el futbol que creamos conveniente, pero
muy pocos acceden al privilegio de proponer y realizar, un futbol que ilumine, encienda y
convoque por lo que se genera dentro del campo...
Todo despojo individual para beneficiar al colectivo que exaltara las virtudes expresadas,
potenciara “las sociedades futbolisticas” en mi caso (para jugar ofensivamente), atacando
los espacios vacios, anticipando el balon y al rival, desnivelando por vocacion atacante y
fundamentalmente, por ser indicador de indisios que aspiren a la grandeza como fin...
La vocacion y la pasion son sinonimos de construccion vital en la formacion, algo que la
gran mayoria no siente para nutrir al futbolista con pautas y conocimientos profundos.
En un campo de futbol sin importar las dimensiones ni el estado del mismo, los “buenos
jugadores” tensan y destensan los musculos ritmicamente sin pasar por la mente (frontera
entre el pensamiento y el instinto), para crear acciones que ni el mas noto (entrenador-
formador) llega a captar.
Es de incomenzurable belleza observar como conducen el balon, se frenan-amagan y
salen, gambetean y desnivelan por calidad tecnica personal intentando
desprejuiciadamente sin ningun catalogo que los perjudique, inventar jugadas una y otra
ves hasta llegar al estadio...
Es por ello que el juego del futbol es tan atrapante y seductor al mismo tiempo...Nos da la
posibilidad a todos nosotros de entrenarlo, hablarlo, plantearlo y jugarlo como creamos
conveniente...independientemente de los logros que se puedan alcanzar como objetivo
final de un futbol de AUTOR O NO...
Entrenador: Facundo Alvanezzi. Martes 11 de Octubre 2011.


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