El Valor de arriesgar...

Desde la llanura de mi mente en expansión comprobé con notable autoridad por que el reflejo de la sociedad es tan fiel según a la misma que pertenezcamos.

Es notable valorizar como el espíritu deportivo en este caso el fútbol, me llevo con orgullo a destinos impensados por mi para alcanzar el éxito deseado

Infinidad de veces me cruce con gente que valora el riesgo de apostar por la grandeza y el valor de los sueños como algo tangible y de notable envergadura para alcanzar el objetivo deseado.

Fue allí cuando intente definir mi futuro y orientación deportiva sin que sean los demás quienes comanden mi derrotero por el mundo. El mismo me expreso un deseo de valentía, que va mas allá de lo que racionalmente me creí capaz de alcanzar.

Todos podemos expresar un deseo de coraje para cambiar (al menos lo intente), pero son los sabios del valor quienes le dan curso y color al instinto sagrado de alcanzarlo y sentirse realizado por experiencia personal efectuada.

Yo en mi camino personal me he sentido pleno a través de un excelente club y con tanta jerarquía como es el Basilea FC de Suiza, con la simiente de lo contra cultural, que me resultaba entablar mis conocimientos mas plenos y seguros. A ello le añadí una gran contracción a la labor Formativa para expandir no solo el riesgo de aprender, sino de valorar y valorarme por lo que soy.

Todos tenemos y encontramos (los soñadores) formas distintas de afrontar y encaminar nuestra senda, para que deje impresa una huella indeleble de fortaleza espiritual y así alcanzar el objetivo...muchas veces es tremendamente difícil nuclear lo que se pretende con la realidad de alcanzar el Sueño al que se aspira. Pero si dejamos que los demás nos indiquen la salida, en lugar del sitio de entrada, estaremos marginando nuestras aspiraciones de grandeza para lograr llegar a donde nos proponemos.

La intención de integrarme a semejante club me llevo por caminos inexplorados por mi, que me obligaban a cultivarme en plenitud, considero que he sido un privilegiado bendecido por Dios y todos mis compañeros que me ayudaron a valorar la vida como la misma me invitaba a descubrirla.

Afronte el camino con valentía, con la realidad cultural y deportiva, que me despertó a un universo inmenso y de grandeza mayúscula. Hoy puedo valorar e interpretar que el Valor al Riesgo a tenido su cause y su premio, soy un acaudalado de ilusiones y sueños que me ayudaron a conquistar un mundo diferente y lleno de oportunidades.

Reflexión Final:

Arriesgue por compromiso y no se si por valentía, me comprometí con mi camino personal, y aunque el tesoro este enterrado en el fondo de mi casa, lo descubriré una ves que vuelva y continúe desandando mi camino.